Cuando las personas pueden hacer un uso racional y adecuado de las bebidas, pueden hacerlo y de hecho, seguirán haciéndolo; este artículo está dirigido a las personas que tienen problemas de alcoholismo o a alguna persona que esté atrapada en esta tan dolorosa y amarga condición.
Cuando escribí un artículo referido a la posibilidad de dejar de fumar para siempre y la creencia que sustentaba dicha posibilidad era la siguiente: “Derrotaré a mi ex conducta “inhalar humo para sentirme bien” en todos sus frentes, en todos los momentos y en todos los días de mi vida”.
El fundamento de dicha idea radica en la realidad del funcionamiento del inconsciente; es muy difícil resistirse al funcionamiento del inconsciente por la simple razón de que representa el noventa y siete por ciento aproximadamente del total de la mente de una persona; en cambio, usar todo ese potencial para concentrarse en la conducta “derrota de un ex comportamiento, en todos los frentes y en cualquier momento en que se presente” produce una fuerza inaudita pues toca la dignidad íntima de cada persona y es ese el mecanismo que permite derrotar a un estímulo negativo provocado por otra persona o a una compulsión proveniente de sí mismo provocada por el hábito; realmente, cuando llega a producirse una razón mayor para el inconsciente, éste ejerce la nueva conducta sin la menor dificultad.
Entiendo que los conceptos que estoy exponiendo son un tanto difíciles de entender por la complejidad del tema pero no importa dicha complejidad si el objetivo se realiza: ayudar a un ser humano a que se libere él mismo de las garras del alcoholismo independientemente del nivel de esclavitud neuronal en que se encuentre.
La afirmación que debe escribir la persona que desee liberarse de la adicción al alcohol es la siguiente: “Derrotaré a mi ex– conducta beber o tomar en todos los frentes en que se presente y tendré el gusto y la alegría de hacerlo por el resto de mi vida”.
La primera vez que se escriba esta afirmación debe ser por una cantidad mayor a cien repeticiones; las demás escrituras serán entre tres y cinco veces al día en series de diez y deberá escribirse un par de afirmaciones en cada momento en que se tenga deseos de beber o de buscar a algún amigo bebedor.
Cualquier persona que haga su esfuerzo honesto y persevere por veintidós días podrá lograr resultados notables y creará referencias en su vida que prueben que toda persona se puede fortalecer y dignificar con la rectificación de su proceso pensante y del ordenamiento positivo de su proceso de carga o de introducción de datos nuevos y liberadores a su mente inconsciente.
Cuando escribí un artículo referido a la posibilidad de dejar de fumar para siempre y la creencia que sustentaba dicha posibilidad era la siguiente: “Derrotaré a mi ex conducta “inhalar humo para sentirme bien” en todos sus frentes, en todos los momentos y en todos los días de mi vida”.
El fundamento de dicha idea radica en la realidad del funcionamiento del inconsciente; es muy difícil resistirse al funcionamiento del inconsciente por la simple razón de que representa el noventa y siete por ciento aproximadamente del total de la mente de una persona; en cambio, usar todo ese potencial para concentrarse en la conducta “derrota de un ex comportamiento, en todos los frentes y en cualquier momento en que se presente” produce una fuerza inaudita pues toca la dignidad íntima de cada persona y es ese el mecanismo que permite derrotar a un estímulo negativo provocado por otra persona o a una compulsión proveniente de sí mismo provocada por el hábito; realmente, cuando llega a producirse una razón mayor para el inconsciente, éste ejerce la nueva conducta sin la menor dificultad.
Entiendo que los conceptos que estoy exponiendo son un tanto difíciles de entender por la complejidad del tema pero no importa dicha complejidad si el objetivo se realiza: ayudar a un ser humano a que se libere él mismo de las garras del alcoholismo independientemente del nivel de esclavitud neuronal en que se encuentre.
La afirmación que debe escribir la persona que desee liberarse de la adicción al alcohol es la siguiente: “Derrotaré a mi ex– conducta beber o tomar en todos los frentes en que se presente y tendré el gusto y la alegría de hacerlo por el resto de mi vida”.
La primera vez que se escriba esta afirmación debe ser por una cantidad mayor a cien repeticiones; las demás escrituras serán entre tres y cinco veces al día en series de diez y deberá escribirse un par de afirmaciones en cada momento en que se tenga deseos de beber o de buscar a algún amigo bebedor.
Cualquier persona que haga su esfuerzo honesto y persevere por veintidós días podrá lograr resultados notables y creará referencias en su vida que prueben que toda persona se puede fortalecer y dignificar con la rectificación de su proceso pensante y del ordenamiento positivo de su proceso de carga o de introducción de datos nuevos y liberadores a su mente inconsciente.
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